La problemática en este sentido se ha visto analizada en el hospital Comarcal de Inca, donde ha tenido ocasión una sesión clínica con el nombre “Agresiones producidas por animales ¿problema emergente de salud pública?”
Además, los niños suelen ser presa fácil por diferentes motivos:
- Tienden a acariciar el animal, lo cual suele ser un acercamiento indebido si la criatura se muestra agresiva o tiene miedo.
- No son conscientes del peligro que sufren ante un animal. Los adultos reconocen con más facilidad el peligro, bien por el tipo de animal o por el gesto del mismo.
- Al tener menor medida que un adulto, el niño parece más débil y no ejerce miedos sobre el animal.
- Suelen jugar con mayor medida con los animales, por lo que muchas agresiones leves son fruto de haber estado jugando con el animal.
Dada la cantidad de casos relacionados con menores de edad, muchos profesionales dedicados a pediatría se ha mostrado muy interesados por las charlas iniciadas por Ramón García Janer, veterinario y jefe del Negociado de Vigilancia de Zoonosis del Servicio de Salud Ambiental de la Dirección General de Salud Pública y Consumo.
Uno de los temas centrales que se han comunicado el las charlas son las actuaciones de control oficial en materia de vigilancia y control de la rabia animal y otras enfermedades de carácter “poco conocidas” en algunos puntos de españa. Una de las zonas con mayor riesgo son las Islas Baleares, donde el Servicio Balear de Salud (IB SALUD) debe tomar cartas en el asunto y mantenerse preparado para la aparición de cualquier caso de rabia animal.
El problema de los animales exóticos
Aseguran que las mordeduras o picaduras de animales reconocidos y tratados de forma continuada y tradicional no suponen ninguna sorpresa en los centros de salud españoles. Sin embargo, los problemas derivados de animales no autóctonos dificultan enormemente las labores el servicio de curción o desinfección de los sanitarios, que en ocasiones tienen que recurrir a especialistas de otras ciudades u otros países para poder verificar y tratar las dolencias del paciente.
La rabia y otras enfermedades exóticas
La enfermedad que más se teme en este sentido, por el hecho de estar muy estandarizada en otros países, es la rabia. Aunque no se detecten casos en los animales de nuestro entorno, la aparición de nuevas razas exóticas pueden crear serios problemas en otros animales o personas.
La Dirección General de Salud Pública y Consumo ha tomado cartas en el asunto mediante una iniciativa para la actualización de conocimientos en esta materia, sobre todo en lo que respecta a la medición del riesgo de la salud ciudadana ante agresiones poco conocidas en nuestro país.
0 comentarios